La esperanza de renovación
Durante dos días en la sede de la Corporación Andina de Fomento CAF, en Caracas, se llevó a efecto el Seminario Internacional “Las Intervenciones Culturales en la Renovación de las Ciudades”, promovido por la CAF y la Alcaldía de Chacao, única de la ciudad que se preocupa por mejorar, de verdad, la calidad de vida de sus vecinos.
En este seminario en el que participó público en general, periodistas, urbanistas, arquitectos y estudiantes se pudo conocer las experiencias de renovación urbana contadas por sus protagonistas. Los ponentes fueron autoridades de Ecuador, México y otros países en los que la iniciativa de los gobiernos municipales ha sido fundamental para adecentar las ciudades. Esta fue la conclusión del encuentro.
La iniciativa municipal -según los ponentes del seminario- es la única en el continente que moviliza a los ciudadanos a mejorar su calidad de vida. La experiencia de Quito, capital de Ecuador, contada por Gonzalo Ortíz, secretario de Cultura de esa ciudad permitió pensar que se puede calcar en Caracas, Miranda, Margarita, Barquisimeto o en cualquier ciudad en la que los buhoneros se hayan apropiado de las calles del centro o de la periferia.
En Quito la transformación comenzó por allí: por reubicar a los 10.000 vendedores informales que acosaban al transeúnte. Se los llevaron a lo que llaman: Centros Populares de Ahorro. Una suerte de mercado de buhoneros o mercados "bolivarianos" de la economía informal o mercados de la dignidad del comerciante, a decir de Freddy Bernal u otro alcalde oficialista.
La clave: inclusión social y firmeza (básicamente). Según Ortíz, los buhoneros son una población que está acostumbrada al clientelismo (es correcto) y con eso chantajean a las municipalidades (otra vez está en lo cierto).
-Y entonces, ¿cómo lo hicieron?
“A los comerciantes se les apoyó con microcréditos y se diseñó un programa de promoción de los locales. Entendimos que los buhoneros cumplen un papel en la economía. No los vimos como un virus en la ciudad", dijo Ortíz.
Hoy, cada día, los que antes eran buhoneros ahora son propietarios del mall mas popular de la ciudad y venden cuatro veces más que en las calles.
Menos intervención
Ortíz, sociólogo y periodista es de la idea que para resolver el problema del buhonerismo es necesario que haya menos intervención del gobierno central y mas actuación del gobierno local que es, en definitiva, al que le corresponde poner orden en las calles. En Caracas la primera experiencia en este sentido la constituye el desalojo de los comerciantes informales del boulevard de Sabana Grande, por parte del alcalde de Libertador, quien devolvió a los transeúntes el famoso paseo, tras 10 años de invasión buhoneril, pero tiene una deuda pendiente: ubicarlos en centros comerciales.
Con las elecciones del 23N se enciende una luz de esperanza para las ciudades que durante ocho años han cargado con la cruz de tener alcaldes ineficientes y ciudadanos indiferentes.
Artículo publicado en el diario El Sol de Margarita el 28/11/2008
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